En Paraguay, una alarmante realidad social continúa perpetuando ciclos de pobreza y desigualdad: cuatro de cada diez mujeres jóvenes de familias vulnerables se ven forzadas al matrimonio antes de cumplir 18 años, según datos revelados por Plan International Paraguay.
Una legislación que perpetúa la desigualdad
El Artículo 20 del Código Civil paraguayo mantiene una controversial excepción que permite el matrimonio de adolescentes de 16 y 17 años con consentimiento parental. Esta disposición legal ha sido duramente criticada por organizaciones defensoras de derechos humanos, que la señalan como una forma de violencia institucionalizada.
"El matrimonio infantil no es una solución, sino que profundiza las desigualdades y expone a las niñas a múltiples formas de violencia y deserción escolar", advierte Noelia Errecarte, representante de Plan International.
Impacto social y económico
La problemática del matrimonio infantil está estrechamente vinculada a la pobreza estructural, perpetuando un ciclo de desigualdad que afecta principalmente a las comunidades más vulnerables. Las estadísticas son alarmantes:
- 16.1% de mujeres entre 15 y 19 años están en uniones tempranas
- Paraguay presenta una de las tasas más altas de la región en matrimonio infantil vinculado a la pobreza
- A nivel global, cada tres segundos una niña es forzada al matrimonio
Movilización y resistencia social
En el marco del Día Internacional de la Niña, diversas organizaciones sociales se han unido para visibilizar esta problemática que afecta especialmente a las regiones más postergadas del país. La campaña "Niñas libres de matrimonio infantil y uniones forzadas" busca generar conciencia y presionar por cambios legislativos urgentes.
Acciones concretas
Plan International ha organizado actividades en espacios públicos de Asunción, Caaguazú, San Pedro, Guairá y Paraguarí, incluyendo una innovadora instalación con códigos QR que conectan a testimonios reales y datos sobre esta problemática. Además, niñas líderes de comunidades rurales están escribiendo cartas a las autoridades, exigiendo cambios que garanticen su derecho a un futuro digno.